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“Vivo con la tecnología” dice la frase final de este spot, y qué mejor manera de dejarlo claro que hacer que el nuevo C4 se transforme en un robot y nos muestre sus ganas de vivir con un soberbio baile.
Esta idea nacida en las oficinas de Euro RSCG Londres, dio la vuelta al mundo de manera viral, es decir, los usuarios lo propagaron enviándoselo unos a otros. No es para menos, la animación de impresionante, y tanta fue la repercusión que otras piezas se desligaron de esta (robots danzantes en las calle, etc). Hoy, además, podrá encontrar en la web la espectacular secuela del Robot Citroen, que cambia el baile por el patinaje. Pero ese no es el punto esencial de este “video viral”.
El video original Citroen se distribuyó por Internet a clientes de Citroen y el fenómeno viral hizo el resto. Hablamos de “video original” porque existen dos versiones de este spot: la primera, una versión de un minuto distribuida por Internet, y otra que tiempo después que se pasó en televisión que dura sólo la mitad (donde el robot no comienza con sus calentamientos).
¿Porqué la versión de Internet es más larga? ¿Porqué hace dos spots de lo mismo? se preguntará. En Internet no necesitas pagar por el tiempo en “el aire”, como en la televisión, donde los precios son elevados. En Internet puedes lucir tu producto sin que nadie te cobre por segundo. Pero, aún más importante, los usuarios de Citroen, así como los amantes de los autos que vieron el spot completo (de un minuto), pudieron decir cuando lo vieron tiempo después en la televisión junto a sus amigos: “Yo ya lo vi, pero completo”.
Esto le da un sentimiento de exclusividad, se siente “especial” para la marca, él es uno de los pocos que ha visto una versión “mejor” que el spot que ha encantado a sus amigos. Sin duda, no es sólo una forma impresionante de vender un auto, sino además de fidelizar a una clientela.
Comentado por: Omar Sotomayor Noel - Director Creativo INQBA
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